La Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, nos presenta hasta el 2 de diciembre la exposición "El retrato moderno en España (1906-1936) Itinerarios y procesos". Una exposición comisariada por Javier Pérez Segura y Adolfo Blanco Osborne, que nos plantea un recorrido histórico por la pintura española desde principios de siglo hasta el inicio de la Guerra Civil, que tiene como núcleo central el retrato.
Se trata de un periodo compositivo muy fructífero donde tienen lugar distintos hechos y circunstancias, que hacen, sea uno de los periodos mas ricos en la historia de la pintura. Nuevas corrientes como el Modernismo, el Cubismo, el Noucentisme catalán, el Futurismo o el Surrealismo hacen su aparición en el panorama español y las sesenta obras que componen la exposición son prueba de ello.
La muestra se centra en un periodo de la historia muy particular, en el cual confluyen movimientos artísticos muy diferentes y donde la pintura experimenta una apertura hacia nuevos caminos formales. Las distintas corrientes artísticas calan profundamente en el lenguaje pictórico empleado por nuestros artistas, haciendo que cada uno lo plasme en sus obras de un modo muy personal.
Horario Ferrer. Maria con vestido azul. 1935. Colección Adán Ferrer
Mariano de Cossio. Retrato de Santiago Pérez Jauregui.
Colección Marisol y Consuelo Pérez Jauregui.
Los retratos, que componen esta exposición no solo nos permiten distinguir aspectos formales innovadores; reflejo de esa cohesión de ideas y formas nuevas, sino que consiguen ser testigo de una época, sirviendo como testimonio para comprender los profundos cambios sociales que están aconteciendo. La pintura ya no pertenece a una élite social exclusiva, sino que los representantes de una clase media son los protagonistas retratados, que tienen a su alcance una pintura de calidad.
La muestra está dividida en cuatro periodos distintos marcados por las influencias y corrientes imperantes en cada uno de ellos. El primero, arranca con la llegada de la modernidad, donde podemos contemplar obras de artistas de la altura de Joaquín Sorolla, Julio Romero de Torres, Anglada Camarasa, Isidro Nonell o Joaquín Sunyer. Todos ellos dan paso al segundo periodo de la exposición donde queda de manifiesto la entrada de las vanguardias en España. El lenguaje pictórico se enriquece con aportaciones del Fauvismo, Cubismo, Futurismo o Expresionismo; Pablo Picasso, Juan Gris, Benjamín Palencia (con un autorretrato deslumbrante), Francisco Iturrino o Daniel Vázquez Díaz (con un espléndido retrato de adolescente) son algunos de los retratistas que encontramos en esta fase.
La siguiente etapa está dominada por los nuevos realismos, con obras de Dalí, Pere Pruna, Ramón Gaya o Esteban Vicente. Y para terminar el recorrido; las obras de los años treinta, donde paralelamente encontramos dos tendencias: la consolidación del realismo, y el surgimiento del Surrealismo, José Arrúe, Mariano de Cossío o Menchu Gal, se encuentran entre los representantes de estos estilos.
La guerra finaliza los procesos creativos, y con ella, perdemos el rastro de muchas de las obras que podemos ver por vez primera en esta muestra tan exclusiva que no te puedes perder.
Paralelamente a la exposición y abierto al público de forma gratuita, se imparte un ciclo de conferencias, realizadas por historiadores especialistas en la materia y críticos de arte, donde se pretende ahondar en el surgimiento de las vanguardias en España y en la temática de la exposición.
Manuel Benedito. Cléo de Mérode, 1910 Colección Santander
Así que si quieres adentrarte en el mundo de la pintura guiado por los mejores especialistas, toma nota y no dejes de visitar esta exposición: C/Alcalá, 13, de martes a sábados de 10.00 a 14.00 y de 17.00 a 20.00 (sábados hasta las 19.00 horas) y los lunes, domingos y festivos de 10.00 a 14.00.