Si todavía no tienes plan para este mes de agosto no te preocupes porque Madrid te ofrece muchas alternativas; aprovecha estas fechas para hacer un recorrido por los principales museos de Madrid ahorrándote las interminables colas. Nosotros te queremos hacer una propuesta que no te puedes perder. Se trata del monográfico a cerca de uno de los principales referentes del fotorrealismo; Richard Estés, que acoge el Museo Thyssen Bornemisza hasta el 19 de septiembre.
La exposición recoge un total de 33 obras procedentes de distintas y prestigiosas colecciones internacionales (como Art Institute de Chicago, Solomon R. Guggenheim Museum, Galería Malborough, entre otras) junto con una importante aportación de la propia colección del artista, que acoge el periodo artístico desarrollado desde 1960 hasta la actualidad. La muestra se celebra conjuntamente con el Palazzo Magnani de la ciudad italiana de Regio Emilia y con la colaboración del Consorcio Turístico de Madrid, y está comisariada por Guillermo Solana y Sandro Parmiggiani.
La calle 43 y Broadway 2005. Colección privada Tennessee.
Accademia 1980. Colección privada EEUU. Cortesía de la Malborough Gallery. Nueva York.
Este artista; uno de los fundadores del fotorrealismo americano, junto a Chuck Close, Malcom Morley o Duane Hanson, emplea la fotografía como fuente de inspiración en sus creaciones originando composiciones mágicas de paisajes urbanos centrados en la ciudad donde reside y trabaja: Nueva York.
Parte de la fotografía realista como base, pero la reinventa y a partir de ella y mediante un complejo proceso técnico, trastoca la realidad y la convierte en un paisaje imposible donde las perspectivas, los reflejos y las luces configuran una nueva composición que origina un fuerte impacto visual.
Su trabajo consiste en tomar instantáneas de lugares que reflejen el momento y la autenticidad de la ciudad de Nueva York y trasladarlo al lienzo. Pero su interés no reside tanto en hacer una copia fidedigna de la realidad, sino en la creación de una ilusión, para ello estas imágenes son manipuladas consiguiendo crear espacios imaginarios que nos proyectan un halo de irrealidad. Los emplazamientos son reconocibles, pero las perspectivas, las luces, las sombras y especialmente los reflejos, están modificados. El paisaje reconocible se ha transformado en una realidad nueva que nos permite contemplar la particular visión que Richard Estes hace de la ciudad de Nueva York.
Fachadas de edificios, escaparates, autobuses, y un juego entre los espacios interiores y exteriores, o entre reflejo y realidad son los elementos que le ayudan a plasmar esta original concepción de sus vistas urbanas, donde por lo general no aparece la figura humana, lo cual, intensifica el efecto desolado y frío que caracterizan sus composiciones.
Autobús turístico del World Trade CenterI 2005.
Stuart L. Peterson.
Un trabajo artístico de indudable talento que no te dejará indiferente, por ello, no dejes de visitar esta exposición