Si en nuestro boletín del mes de julio, os avanzábamos las reformas iniciadas en los tres museos más emblemáticos de la ciudad. Este mes se ha producido la segunda de ellas, la incorporación de la colección privada de la baronesa Carmen Cerveza al Museo Thyssen.
El Museo Thyssen Bornemisza nace en 1992 con la finalidad de mostrar la colección que el Barón Thyssen había heredado e incrementada por su propia voluntad por el amor que el Barón demostraba hacia el arte.
La ampliación del Museo, llevada a cabo por el estudio de arquitectos liderados por Manuel Baquero y Francesc Plá, ha consistido en la unión del edificio anexo al Palacio Villahermosa con la finalidad de incrementar los metros totales, aumentado en un 50 % el espacio expositivo.
En todo momento, los arquitectos han buscado no romper el hilo expositivo cronológico y estético interno, mientras que la fachada exterior rompe con la estética de los edificios que lo rodean. Recordamos, que el Palacio de Villahermosa es de estilo Neoclásico y ahora lo veremos unido a exterior totalmente contemporáneo.
Las obras destinadas a cubrir este nuevo espacio, provienen de la colección privada de la Baronesa, que se ha ido forjando en los últimos años. Carmen Cervera ha cedido a la Fundación, por un plazo de once años, 220 obras de singular relevancia.
De este modo, se refuerza la colección histórica siguiendo los mismos criterios con los que se inicio el museo, y que obedecían a los gustos personales de sus fundadores.
Destacamos de las adquisiciones: "El jardín del Edén" de Jean Brueghel el Viejo; "La soledad. Recuerdo de Virgen. Limusine" de Corot; "Campos de Coles. Pontoise" de Pisarro; "El puente Charing Cross" de Monet; "Portuguesa. La gran portuguesa" de Delaunay; "Las segadoras" de Picasso; y "Mujer sentada" de Juan Gris;...
Los segadores de Picasso