Volver        

PAISAJE

Este estilo está representado en Nave del Arte por los artistas: Julián Recio, Antonio Mollá, Cristina Bergoglio, Alfonso OcónÁngel Izarra y Abelardo Hernández.

 

Cristina Bergoglio  "Chrysler nocturno"

Abelardo Hernández  "La Puerta del Sol"

Ángel Izarra  "S/T"

 

Julián Recio "Paisaje revivido 52"

 

Alfonso Ocón  "Cibeles"

 

Antonio Mollá  "El bar de la playa II"

I expressed myself by means of nature. But if you carefully observe the sequence of my work, you will see that it progressively abandoned the naturalistic appearance of things and increasinngly emphasized the plastic expression of relationships."  

          Piet Mondrian Dialogue of the New Plastic, 1919.

El paisaje, tema recurrente en todas las tendencias artísticas, adopta diferentes visiones en cada uno de los movimientos artísticos:

          Durante el setecientos la inspiración para las pinturas de paisaje, bebía de la tradición clásica – escenas de Poussin -  o más indirectamente, las idílicas escenas de Ruysdael. En la segunda mitad de los ochenta, el Romanticismo, inyectará una nota de oscuridad; la fuerza de la naturaleza y lo sublime, en la turbulentas representaciones de Turner y las apocalípticas visiones de John Martin.

A principios del siglo XX, el género paisajista dominará la escena del arte moderno. El Impresionismo abordó espontáneas representaciones de la naturaleza enfocadas a las clases medias urbanas y su divertimento. Partiendo de su inicial fidelidad a la realidad, Claude Monet, protagoniza un cambio conceptual, presentando una visión donde la luz y el color  adquieren un fuerte matiz evanescente y donde el motivo deja de ser el protagonista en pro del modo de ejecución, es decir de la personalidad del artista. El grupo fauvista, encabezado por Matisse, llevó la teoría impresionista del color a su extremo máximo, yuxtaponiendo puros y vivos colores en búsqueda de una intensidad total. Más significativa será la línea seguida por Cézanne, aunando la representación de la luz y el color con el volumen y la profundidad.

 

Esta visión optimista comenzará a perder fuerza a medida que finaliza la centuria. El darwinismo revela la arbitraria y cambiante condición de la naturaleza, en cambio constante y brutal competitividad. Las nuevas pautas de conocimiento científico aportan una nueva concepción de la tierra y el individuo que dejan atrás la creencia de que el hombre está situado en el centro del orden natural. Para los pintores abstractos, cualquier referencia al mundo natural-visible vendrá de la mano de lo metafórico – Piet Mondrian, la conceptualiza en planos de color partidos por líneas horizontales y verticales; Wassily Kandinsky, apuesta por la creación de equivalentes espirituales del medio natural.

 

Si los artistas abstractos de entreguerras miraban a la naturaleza como punto de referencia para materializar sus metáforas de lo real, con el surrealismo lo irracional será la fuente de inspiración; se toma el género del paisaje para dar vida al sueño y las visiones generadas en la mente subconsciente, representadas en meticulosas representaciones cargadas de simbolismo. En Estados Unidos, se opta por un lenguaje expresionísta que toma de la naturaleza una clara referencia que pierde total entidad en el proceso de ejecución. Jackson Pollock, uno de los exponentes del movimiento, responde a las cuestiones relacionadas con su arte y la naturaleza, afirmando que él es la naturaleza.

 

Tras la Segunda Guerra Mundial, las corrientes filosóficas del existencialismo y el trascendentalismo, provocarán una corriente de definida por la percepción que el artista tiene de lo que le rodea. Lucio Fontana, con sus lienzos rasgados y punzados, o Morris Louis, utilizando velos de color puro para crear equivalentes, no figurativos, de las sensaciones del espacio y la luz natural. Una figura trascendental será Joseph Beuys, con su fascinación por la morfología natural, relacionando en su trabajo arte y ciencia y defendiendo un nuevo acceso a la naturaleza. En sus proyectos, prestó especial atención a los problemas de polución y destrucción del medio natural, utilizando numerosos materiales, en particular sus experiencias con miel, cera, grasa y fieltro, dándoles un fuerte sentido simbólico de aspectos esenciales del mundo natural.

 

            A final de los sesenta la definición y el rol de la naturaleza, sufre una transformación. El Arte Povera, en Italia, introduce fragmentos y emblemas de la naturaleza en las galerías de arte; en Estados Unidos, los artistas tienden a suplantar el espacio de galerías y museos para trabajar en contacto directo con la naturaleza. Robert Smithson con Spiral Jetty (1970)  - una espiral de 1.500 pies  enrollada en el interior del Great Salt Lake, en Utah -.

 

            El artista contemporáneo adopta el tema de la naturaleza desde una visión, sugerida por Smithson, que busca el diálogo entre el ecologismo y la imperante sociedad industrial de las nuevas tecnologías. Andreas Gursky y Thomas Struth, utilizan en sus fotografías de espacios urbanos, medios compositivos de las grandes pinturas paisajístas del pasado, poniendo de manifiesto los puntos de unión y dispares entre pasado y presente, entre dos conceptos de realidad; un interés por la expresión de las dos caras entre naturaleza y cultura. El paisaje sigue siendo, de mano del artista contemporáneo, un espacio para la innovación técnica y tecnológica.    

 

 Volver


nave del arte
Aviso Legal Copyright © 2006-08 [Nave del Arte]. Reservados todos los derechos.
Revisado el: 23 de febrero de 2007.

 

Contador de visitas a la página